jueves, 22 de mayo de 2014

La fiera de mi niña (Bringing Up Baby, 1938) de Howard Hawks




¿Cómo es posible que le ocurran todos estos disparates a una misma persona?



David Huxley (Cary Grant) es un tímido paleontólogo que está a punto de terminar una reconstrucción del esqueleto de un brontosauro y de casarse con su secretaria. Para concluir su proyecto necesita un mecenas, por lo que acude a una partida de golf con el abogado de una millonaria. Allí conoce a Susan Vance (Katharine Hepburn), una joven impulsiva y caprichosa que no dejará de hacerle la vida imposible.


Alocada comedia con un ritmo arrollador que se ha convertido en un clásico entre los clásicos dentro del género de la screwball comedy. Las disparatadas situaciones en que se encuentran los protagonistas -lidiar con un leopardo, encontrar un hueso milenario enterrado por el perro de Susan, etcétera- parecen destinadas al absurdo, pero Hawks consigue dotarlas del más simple realismo, convirtiendo esta irrefrenable aventura en un duradero referente en el que todavía hoy los guionistas y cineastas cómicos se inspiran.

Pese a que La fiera de mi niña resultara un fracasó de taquilla en su día, no cabe duda de que el tiempo ha jugado a su favor, pues hoy es considerada unánimemente como una de las mayores obras maestras del cine estadounidense. El gran cómico Harold Lloyd, por ejemplo, declaró que ésta era la comedia mejor construida de la historia.


No le faltaba razón; Hawks impregna a la narración el ritmo frenético pero racional adecuado, el guión está repleto de líneas brillantes y las maravillosas interpretaciones del dúo protagonistas se ven perfectamente acompañadas por un notable elenco de secundarios. 

El desenlace del filme puede resultar previsible, tratándose de una comedia romántica clásica. Los antagónicos protagonistas, que han mantenido una relación de amor-odio durante toda la película acaban abrazados en lo alto de la grúa del museo. Eso si, a sus pies, el enorme brontosauro al que David a dedicado cuatro años de trabajo, se derrumba. 


Son muchos los momentos destacables de La fiera de mi niña: El primer encuentro en el campo de golf, la cena con la tía Elizabeth en la que David no pierde de vista a George (el perro), la tremenda confusión que lleva a buena parte de los personajes a la cárcel....

Poco más se puede añadir, hablamos de una de las comedias más influyentes de la historia del cine cómico, por lo que debemos animarles a pasar un rato delicioso con un filme inolvidable.






2 comentarios:

  1. Igual me confundo pero la novia de Grant no es su secretaria, sino una paleontologa colega suya.

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    1. Hola Carmen,

      La novia de Grant trabaja con él en el museo así que podemos suponer que algo sabrá sobre paleontologia. Lo que es seguro es que ejerce de secretaria de su prometido.
      Un saludo.

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