Compositores Románticos: Frédéric Chopin, el poeta del piano

"Tras tocar música de Chopin, siento que lloro por pecados que nunca cometí y 
plaño tragedias que jamás ocurrieron"

                                                                                           

Oscar Wilde

Fryderyk Franciszek Chopin (1810-1849) fue un compositor y virtuoso pianista polaco consagrado como el primer poeta del piano. Su figura es una de las más populares dentro del ámbito de la música clásica.

Exiliado, abandonado por su amante, moribundo y consumido. Su frágil imagen se ajusta debidamente a los estereotipos del artista romántico. 

Chopin compuso casi exclusivamente para piano, pocas son las obras que utilizan otros instrumentos. Él mismo confesó en alguna ocasión que su talento florecía al teclado.

Ofreció su primer concierto con tan solo ocho años e ingresó en el conservatorio de Varsovia.

Tras componer sus primeras obras se fue exiliado a París, donde forjó su reputación internacional gracias a la naturaleza delicada y poética de su música.

Prefería los conciertos privados a exponerse al público general, pero estos no conseguían cubrir sus necesidades, puesto que  tenía unos gustos "muy caros".

Su actividad musical más constante fue la pedagógica. Chopin solía atender a una media de 5 alumnos diarios durante los seis meses anuales que dedicaba a enseñar. Esta labor lo mantuvo ocupado casi una cuarta parte de su vida y fue constante desde 1832 hasta el día de su muerte. Por esta constante dedicación llego a convertirse en uno de los grandes maestros del instrumento de la época. Chopin se mostraba orgulloso de ello, no como su fiel amigo Franz Liszt, quien detestaba que se recordara de él su condición de maestro. La mayoría de sus alumnos pertenecieron a familias aristocráticas de la época.

Tuvo una relación de nueve años con la novelista George Sand y tras su separación en 1847 su salud empezó a deteriorarse velozmente. En esos años apenas escribió más música. Visitó Inglaterra y Escocia en 1848 muriendo un año más tarde en París. Se estima que a su funeral acudieron alrededor de 3000 personas.

Tumba de Chopin en el cementerio Père-Lachaise de París