"Todo el mundo es un escenario, y todos los hombres y mujeres meros actores: tienen sus salidas y sus entradas; y un hombre en su tiempo interpreta a muchas partes..."
William Shakespeare
Cuando un grupo de actores ambulantes viaja a una pequeña población portuaria, el director de la compañía se reencuentra con una antigua amante y su hijo, al que hacen creer que es el sobrino de éste.
Remake de un film mudo del propio director titulado "Historia de una hierba errante" (Ukigusa monogatari, 1934), en el que Ozu refleja, entre muchas otras cosas, la itinerante vida de los actores de teatro japoneses. Como ocurre habitualmente con el maestro nipón, el film puede servir perfectamente como un retrato costumbrista de una época, una sociedad y unas personas concretas.
Magistral en sus formas, la película es un perfecto ejemplo del cine de su autor. Con su cámara estática y a baja altura, sus encuadres milimétricos, su perfecto uso del color y su ritmo pausado y reflexivo, Ozu nos invita a acercarnos a la sencilla a la vez que compleja vida de unos personajes perfectamente construidos que hacen frente a aquellas cuestiones vitales de las que nadie puede escapar, aquellos temas universales que nadie en el cine ha sabido tratar como el japonés.
La hierba errante no se focaliza en un único drama. Mientras atendemos a la dura vida del actor, sumida en la pobreza y sin opción de echar raíces -de ahí el título del film-, asistimos a un drama familiar provocado en parte por este último elemento. Así, indagaremos en los sentimientos de un hombre que no ha sabido ser un buen padre, de una joven pareja enamorada, etc.
Hay que decir que, además de la excepcional virtud de Ozu a la hora de concebir los planos y encuadres, deja buena muestra de su capacidad simbólica. El joven enamorado que aparece a oscuras, la separación del maestro y su enamorada bajo una intensa lluvia o su reconciliación al compartir el fuego del encendedor son algunos buenos ejemplos.
La hierba errante es, en definitiva, un excelente largometraje, de primera categoría. Uno más de este gran genio llamado Ozu, cuyo arte está impregnado de una sabiduría sin parangón en el mundo del cine.
Com et flipes fent una entrada sobre una peli del Ozu xD, molt dacord amb tot i si, una més en la llarga llista de grans películas del més sabi entre tots els directors. Ens veiem aviat!
ResponderEliminarNo podia faltar un gran mestre com ell al bloc. Sempre passa el mateix, al principi t'agrada molt però sembla que no hagis vist res, i amb el temps i una mica de reflexió te n'adones de la seva dimensió.
ResponderEliminarUna abraçada company.