• Hay que estar bien alerta con todo intento de enmarcar un conflicto como es en este caso el de género, especialmente si se trata de uno con apariencia progresista.
  • La trabajadora actual vive en un mundo globalizado, víctima de la precariedad laboral y solo pudiendo sentirse parte de un proceso económico, sin una identidad cultural a la que aferrarse.
  • El sexo, el género, binario o no binario, fluido... tras el auge de luchas como la feminista o por la libertad sexual, muchas han sido las realidades de este tipo que se han puesto sobre la mesa.
  • Es importante retener 2 concepciones de la naturaleza del ser humano, la social, que constituye la base de la educación, y la política, que contribuye a la extensión de susodicha educación; porque, son 2 elementos fundamentales en la construcción y salud del sistema democrático.
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23 septiembre 2014

Música Romántica II: La Ópera; Escuelas Nacionales

Ópera Romántica

En el romanticismo, todo el mundo quería asistir a la representación de la nueva ópera del momento o escuchar a su cantante favorito. Dicha fama fue ganada gracias a los temas humanos que trataban las obras, generando grandes emociones entre el público. Un buen ejemplo de ello es el Rigoletto de Verdi, que examina la relación padre-hijo.

Las óperas generalmente surgen de la literatura. Los libreteros siempre se han inspirado en grandes historias, como el romance de Dido y Eneas en la Eneida. Pero a partir del siglo XIX se inspiraron concretamente en un conjunto de escritores, mayormente Shakespeare, Walter Scott, Goethe y Schiller, además de las antiguas leyendas y poemas de la edad medieval, que también tuvieron su papel, como en “Los nibelungos” de Wagner.


Wagner fue quizás el compositor de ópera más importante de todos los tiempos, pues reinventó el género (incluso la música en cierta medida) como drama musical, ya que quiso crear una obra que unificara poesía, drama, música, canción y pintura.
En base a esto, es de esperar que los personajes predilectos de Wagner fueran los del héroe, la heroína y la damisela afligida.

Las dos grandes tendencias que surgieron en la ópera romántica fueron:

Verismo o realismo: Fue una tendencia surgida en Italia en el romanticismo tardío que trataba de traer el naturalismo a la ópera.


Bel Canto: Significa canto vello. Es un estilo vocal desarrollado en Italia en el romanticismo temprano con muchas florituras y dificultades para ser ejecutado. No existe una descripción consensuada de lo que significa.


Compositores importantes y su/s mejor/es ópera/s:


Carl Maria von Weber (1786-1826): El Cazador Furtivo
Gioachino Rossini (1792-1868): El Barbero de Sevilla
Gaetano Donizetti (1797-1848): Lucia di Lammermoor
Vincenzo Bellini (1801-1835): Norma
Giuseppe Verdi (1813-1901): Rigoletto, Traviata & Aida
Richard Wagner (1813-1883): Parsifal, El Anillo de los Nibelungos & Tristán e Isolda
Léo Delibes (1836-1891): Lakmé
Georges Bizet (1838-1875): Carmen
Giacomo Puccini (1858-1924): La Bohème & Madame Butterfly
Johann Strauss Jr (1825-1899): El Murciélago

Escuelas Nacionales


Durante el siglo XIX y principios del siglo XX, cuando se formaban los estados modernos, la música de muchos compositores se usó para declarar la identidad nacional.

Desde la época barroca o incluso en épocas anteriores los diferentes países tenían un estilo musical propio, pero llegada esta época los músicos definieron su música según su nacionalidad, diferenciándose de la de otras naciones.

Quizás el mejor ejemplo se encuentre en el caso de Rusia, donde a lo largo de la historia la espléndida música europea fue importada para la aristocracia debido a que en su país predominaba la música popular folclórica. Por ello surgió la necesidad de igualarse culturalmente con Europa y apareció la que quizá sea la escuela nacional más rica.

Veamos algunos ejemplos de Escuelas nacionales Europeas y algunos de sus más reconocidos autores:

Escuela Rusa


Modest Mussorgski (1839-1881): Cuadros de una Exposición
Sergei Rachmaninov (1873-1943): Concierto para Piano No.2 Op.18

Escuela de Europa del Este 


Antonín Dvorák (1841-1904): Sinfonía No.9 Op.95

Escuela Austroalemana


Carl Orff (1895-1982): Carmina Burana

Escuela Escandinava


Edvard Grieg (1843-1907): 2 Suites Peer Gyn
Jean Sibelius (1865-1943): Poema Sinfónico Finlandia, Sinfonía No.5 & Vals Triste

Escuela Británica


Edward Elgar (1857-1934): Concierto para Violonchelo Op.85
Ralph Vaughan Williams (1872-1958): Fantasia sobre un tema de Thomas Tallis

Escuela Francesa 


Camille Saint-Saëns (1835-1921): El Carnaval de los Animales y Danza Macabra
 Claude Debussy (1862-1918):Claro de Luna y Arabescas

Escuela Española


Joaquín Rodrigo (1901-1999): Concierto de Aranjuez

Escuela Estadounidense


Edward MacDowell (1860-1908): Concierto para Piano No.2 & Woodland Sketches



19 junio 2014

Musica Clásica: En busca de la Pieza Perfecta


















A mediados del siglo XVIII surgió el clasicismo, un nuevo estilo musical con la idea de sostener la claridad, la moderación y el equilibrio en las composiciones, tratando así de conseguir la pieza perfecta.

Aunque se trate del periodo más breve, ocurrió entre grandes cambios sociales y políticos, como la revolución industrial, la colonización y el surgimiento de una clase media interesada por el arte.

Los valores estéticos de éste evolucionaron gracias al descubrimiento de las ruinas de Pompeya en 1748, mostrando a Europa la simplicidad y elegancia de la cultura griega y romana de la edad antigua.
Los compositores del clasicismo temprano buscaban un estilo con una melodía simple acompañada de una sucesión de acordes. Las antiguas polifonías, melodías ornamentadas y sobretodo la técnica del bajo continuo del barroco quedaron prácticamente olvidadas.


Los susodichos eran contratados por la nobleza, pero eran considerados como sirvientes hasta que los conciertos públicos empezaron a ser accesibles para el ciudadano medio, permitiendo así que los músicos empezaran a ganar dinero y fama con sus interpretaciones y composiciones.

Poco a poco la música instrumental se hizo más popular que la vocal y los compositores empezaron a desarrollar gran cantidad de formas musicales. Inicialmente, el resultado fue el principio de sonata, una estructura musical de tres secciones que derivó en los primeros movimientos de sonatas, sinfonías y de prácticamente toda la música instrumental de la época.

Como puente entre el barroco y el clasicismo se encuentra C.P.E. Bach, hijo de J.S. Bach, cuyo estilo expresivo y sutil sentó las bases de este nuevo periodo, sobretodo perfeccionando la sonata.


Pero gran parte del trabajo se desarrolla primordialmente en las manos de W.A. Mozart y Haydn, quienes intentaron romper las formas definidas de la música anterior. Beethoven fue el tercero más importante, pero ya hablaremos de su trabajo en la próxima entrada.

Para explicar la evolución de la música instrumental nos centraremos en sus trabajos principalmente:

1 – Música para teclado: El Clavecín se ve totalmente eclipsado por el pianoforte (actualmente llamado únicamente piano). Estos 3 compositores concibieron sonatas, fantasías, arietas, caprichos, suites y bagatelas para el instrumento. Desarrollaron en los movimientos de sus obras melodías fácilmente recordables y cantables (en el barroco la mayoría de melodías son difícilmente cantables por su complejidad) como si se tratara de un texto transcrito al lenguaje del instrumento.


2 – Música de Cámara: El Cuarteto de cuerda llega a su madurez gracias a Haydn, sus modelos fueron utilizados por Beethoven y Mozart en sus primeros cuartetos. Después de muchas composiciones consigue obtener un equilibro entre parejas de instrumentos -anteriormente el violín era el instrumento solista por excelencia y los demás instrumentos por lo general se limitaban a acompañarlo (Las cuatro estaciones de Vivaldi es la gran excepción). Mozart consiguió aumentar considerablemente la carga dramática de sus cuartetos y compuso unos en los que el cello era el solista. A partir del cuarteto se creó el trio, el quinteto y también se introdujo el piano en estos conjuntos nombrados.


3 – La Sinfonía: A través de Haydn y Mozart se puede apreciar toda la evolución del género. Haydn, con más de 100 sinfonías en su repertorio, consiguió lo que hoy calificamos como “clásico”. Variedad, equilibrio, maestría y sencillez son las palabras que usamos para describir sus 12 sinfonías para Londres (las más elevadas). Su evolución sinfónica se caracteriza también por la ampliación de las dimensiones de las obras, cosa que Beethoven seguirá haciendo hasta su última sinfonía.


Mozart sigue una evolución parecida a la de Haydn, pero sus últimas sinfonías (39,40,41) alcanzan una grandiosidad muy superior, pues se pueden apreciar los indicios del romanticismo en ellas.


En el campo de la música vocal se perfeccionó la ópera y surgieron las primeras del género en alemán. También apareció la ópera bufa (obra cómica, que requiere pocos recursos para su ejecución). El terreno sacro pasó a un segundo plano, pero las composiciones dentro de este género siguen siendo más que excelentes, sobre todo el celebérrimo e inacabado Réquiem de Mozart, la obra maestra indiscutible del clasicismo y uno de los mayores logros musicales de la humanidad.


Finalmente decir que la aristocracia europea no podía mantener a los artistas por culpa de las guerras napoleónicas y el mecenazgo empezó a caer. Fue así como los artistas empezaron a trabajar por su cuenta y se vieron con la libertad de crear la música que ellos sentían, no la que sus amos pedían. Así surgió el Romanticismo.

Compositores más importantes del periodo y su mayor obra

Christoph von Gluck (1714-1787): Ópera "Ifigenia en Taúride"
Carl Philippe Emanuel Bach (1714-1788): Sinfonía en mi bemol mayor WQ179
Franz Joseph Haydn (1732-1809): Sinfonía No. 104 "Londres" y Oratorio "La Creación"
Muzio Clementi (1752-1832): "Gradus ad Parnassum"
Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791): Réquiem, Opera "Don Giovanni", Concierto para piano No.21 y Sinfonía No.41 "Jupiter"
Ludwig van Beethoven (1770-1827): Sinfonía No.3 "Eroica" (del periodo clásico)
Louis Spohr (1784-1859): Concierto para violín No.8 en la menor Op.47

Fuentes Bibliográficas

Marie-Claire Beltrando-Patier. (1996). Historia de la Música, La música occidental desde la Edad Media hasta nuestros días. España: Espasa Calpe S.A.
John Burrows. (2006) Música Clásica. España: Espasa Calpe S.A.


13 junio 2014

Música Barroca: Auge de la música instrumental y nacimiento de la Ópera


Antecedida por el renacimiento y como reacción contra las reformas del siglo XVI, el periodo barroco en la música abarcó desde el siglo XVII hasta mediados del XVIII.

Una época con sede en Italia y desarrollada en Francia y Alemania que vivió el nacimiento de la ópera, el de la orquesta y la pujanza de la música instrumental gracias al perfeccionamiento de los instrumentos musicales. Dominaron los elementos armónicos y rítmicos en lugar de los melódicos.

Cómo en los demás artes, este periodo fue de gran creatividad. Casi entrado el siglo XVII un nuevo estilo musical surgió y destrono el estilo polifónico de la música antigua. En vez de partes complejas con varias líneas melódicas se pensó en una única voz o instrumentos solistas por encima de un acompañamiento simple, a esta nueva combinación se la llamó monodia(homofonía) y daba libertad al intérprete de ornamentar y embellecer la voz o instrumento solista, así nació el dramatismo musical, algo impensable en la polifonía anterior. Remarco que no se dejó de hacer música polifónica, solo que se hizo una síntesis de la música anterior de este tipo y surgieron nuevos estilos, sobretodo renovando la fuga.


Prácticamente al mismo tiempo nació la ópera. Se atribuye tal creación a los músicos Giulio Caccini y Jacopo Peri y al poeta Ottavio Rinuccini, que intentaron recrear el estilo de canto dramático de la antigua Grecia. En el Año 1586 compusieron Dafne, la primera ópera autentica de la historia, anteriormente solo se interpretaban dramas musicales cortos en los entreactos de obras teatrales. Pero no fue hasta el año 1607 cuando Claudio Monteverdi compuso Orfeo, el punto de referencia para las primeras operas maduras y la más antigua que hoy en día aún se interpreta.

Gracias a la ópera surgió la Orquesta ya que esta necesitaba conjuntos de instrumentos mayores, los conjuntos de cámara se empezaron a conservar como signo de prestigio en las cortes europeas.


En el terreno de música Sacra, las formas vocales más importantes que surgieron en esta época fueron el Oratorio y la Cantata que llegaron a su cúspide con las composiciones de J.S. Bach, especialmente con la obra “La Pasión según San Mateo” BWV 244, y con las de G.F. Haendel con “El Mesias” HWV56.


Aunque como ya se ha dicho, las formas vocales no fueron las únicas en evolucionar. La música instrumental tuvo un crecimiento muy importante, se creó una gran demanda de sonatas instrumentales y conciertos para entretener a los nobles. 

Fue la edad de oro del violín, Claudio Monteverdi demostró su potencial en Orfeo y a partir de ese momento su repertorio de obras se amplió considerablemente.

También se potenció el uso del teclado (clavicémbalo y órgano) y surgieron grandes virtuosos como Johann Pachelbel o J.S. Bach, atrayendo la atención de la corte y la Iglesia. Por otra parte, a principios del siglo 18 Bartolome Cristofori inventó el piano, instrumento que le llevó varias décadas perfeccionar y que se acabaría convirtiendo en uno de los más perfectos diseñados por el hombre.


El final del barroco viene marcado por la muerte de J.S. Bach y la ceguera de G.F. Haendel ocurridas ambas en 1750. Estos 2 compositores, aparte de llevar a su máxima expresión la música sacra del periodo, sintetizaron todos los estilos internacionales de su época y del pasado. Su música cayó en el olvido hasta la extraordinaria recuperación de toda la música barroca que se hizo en el siglo XIX.

Compositores más importantes del periodo y su mayor obra

Claudio Monteverdi (1567-1643): Opera "Orfeo"
Jean-Baptisme Lully (1632-1687): Opera "Armide"
Johan Pachelbel (1653-1706): Canon en Re
Henry Purcell (1659-1695): Opera "Dido y Eneas"
Antonio Vivaldi (1678-1741): Conciertos para Violín Op.8 1-4 "Las Cuatro Estaciones"
Georg Philipp Telemann (1681-1767): Música de Mesa & Suite Burlesca de Don Quijote
Jean-Philippe Rameau (1683-1764): Opera "Hipólito y Aricia"
Domenico Scarlatti (1685-1757): Stabat Mater & Sonatas en la mayor K181-182
George Frideric Hândel (1685-1759): Oratorio "El Mesias" & Música Acuática
Johann Sebastian Bach (1685-1750): Oratorio "Pasión según San Mateo" & El arte de la fuga

Fuentes Bibliográficas

Marie-Claire Beltrando-Patier. (1996). Historia de la Música, La música occidental desde la Edad Media hasta nuestros días. España: Espasa Calpe S.A.
John Burrows. (2006) Música Clásica. España: Espasa Calpe S.A.


10 junio 2014

Música Antigua: La Edad Media y el Renacimiento



Este periodo de la música, que va desde el siglo XI hasta principios del XVII, es sin lugar a dudas el menos conocido por músicos y público general. Una etapa llena de cambios y progresos en el lenguaje musical que hasta el siglo XIX fue prácticamente del todo ignorada.

Los compositores y músicos de esta época acostumbraban a ser sacerdotes. Para componer y escribir música se necesitaban unos conocimientos muy elevados y las personas que recibían una educación solían ser contratadas por la iglesia, vivían en una institución religiosa, o bien formaban parte de la nobleza.


La música que se conserva va íntimamente relacionada con lo sagrado. La música sacra más común en este periodo fue el canto llano, también conocido como canto gregoriano (en honor al Papa Gregorio Magno, el más importante de la edad media temprana), consistente en composiciones de una sola línea melódica (monófonica). Esta música se empezó a firmar y a conservar enteramente de forma escrita a partir del siglo XII, después de que Guido d’Arezzo desarrollara el pentagrama un siglo antes. Hasta el siglo IX, los libros de canto solo contenían los textos a cantar y no la notación musical, lo que dificultaba mucho la difusión obligando a transmitir las melodías mediante la importación de cantores que las conocieran, además de las obras.


A partir del siglo XII aumentaron las formas polifónicas (múltiples líneas melódicas) de composición. Los cantantes trabajaban sobre los cantos llanos básicos añadiendo otras partes en acontecimientos especiales. Ya en el siglo XIII, existía un gran repertorio de polifonías por todas las iglesias de Europa y las composiciones no religiosas empezaron a utilizar más de una voz (línea melódica).

Los compositores no religiosos más famosos de la época fueron los trovadores, poetas-músicos que surgieron en Francia y cuya música expresaba los ideales del amor cortés. Se cree que acompañaban las canciones con la vihuela, el instrumento precursor del violín.

A mediados del siglo XIII aparece el Motete, un género musical polifónico que evoluciona del canto llano adoptando un modelo rítmico estricto, por encima del cual se situaban entre una y tres líneas melódicas con un texto diferente cada una, generando así una música compleja con diferentes matices en la que muchas palabras diferentes suenan simultáneamente.



Tres siglos después se inició el Renacimiento. Los compositores de finales del siglo XV eran conscientes de que su trabajo era un nuevo arte. En esta etapa la música instrumental llegó a tener tal estatus que fue más copiada que la música vocal de la Edad Media.

En esta época las clases populares empezaron a implicarse más y más en la interpretación de la música gracias a la invención de la impresión musical por parte de Ottaviano Petrucci en 1501, que facilitó la creación y distribución de ediciones baratas. Pese a ello, la mayor parte de la música siguió siendo manuscrita.


Al tratar de apreciar la música antigua nos limita el hecho de no saber cómo sonaba en su contexto original y lo que significaba para los que la interpretaban o escuchaban. Miles de composiciones fueron quemadas por la reforma protestante del siglo XVI o simplemente se han perdido, pero por otro lado existe una gran variedad de interpretaciones de lo que ha llegado a nuestras manos, lo cual es testimonio de cuánto queda por descubrir sobre este repertorio que parece tan lejano, aunque ello no nos impide disfrutar de su indudable calidad e importancia histórica.

Compositores más importantes del periodo y su mayor obra

Guillaume de Machaut (1300-1377) : Misa de Notre-Dame
Josqun Desprez (1450-1521) : Misa "Pange Lingua"
Thomas Tallis (1505-1585) : Motete "Spem in Alium Nunquam Habui"
Giovanni Pierluigi da Palestrina (1525-1594) : "Missa Papae Marcelli"
William Byrd (1540-1623) : Obra Litúrgica "Gran Oficio"
Giovanni Gabrieli (1554-1612) : Motete "O Magnum Mysterium"
Claudio Monteverdi (1567-1643) : Opera "Orfeo"

Fuentes Bibliográficas

Richard H. Hoppin. (1978). Música Medieval. Madrid, España: Akal S.A.
Marie-Claire Beltrando-Patier. (1996). Historia de la Música, La música occidental desde la Edad Media hasta nuestros días. España: Espasa Calpe S.A.
John Burrows. (2006) Música Clásica. España: Espasa Calpe S.A.


20 mayo 2014

Música Romántica: Auge del expresionismo musical


El romanticismo en la música surgió a principios del siglo XIX, un poco más tarde que en los demás artes. Se considera que hoy en día aún hay músicos románticos. Al movimiento se le puede reivindicar como el redescubridor de la música del pasado. Algunos afirman que es el periodo en el cual hubo más músicos notables.

El músico romántico idealizado vive en un desgarramiento continuo y a menudo sólo puede transmitir un clima de angustia y de lucha. Éste rechaza las limitaciones de las convenciones clásicas, la originalidad y su instinto crean procedimientos de expresión personales en constante evolución. 

En este periodo se desarrolla el sentido de la musicalidad del lenguaje; los compositores buscan una expresión musical que realce el valor de la palabra y su sentido profundo.

Gracias a esto se alcanza la más alta expresión del Lied y la Melodía, formas poético-musicales de carácter nacional perfeccionadas a partir del canto acompañado, el primero marcado por las cualidades del arte alemán y la segunda por el genio francés. Tales formas fueron notablemente explotadas por Schubert, Schumann, Fauré y Dopare entre otros.


En el campo de la música instrumental la naturaleza se convierte en la gran inspiración, el mejor ejemplo de ello es la Sinfonía Pastoral de Beethoven.

Los instrumentos son perfeccionados hasta llegar prácticamente a su forma actual, aunque el que dominó en este tiempo fue el piano y la mayoría de compositores dominaban su técnica y lo utilizaban para componer sus obras. Poco a poco se produjo una creciente demanda de pianos para el hogar, lo que reclamaba nuevas composiciones cortas adecuadas para tocar en casa.

El número de sociedades sinfónicas aumenta considerablemente y estas empiezan a adquirir renombre. La figura del director de orquestra es cada vez más importante.


En los conjuntos de cámara, la forma más popular fue el trío para piano y los cuartetos, quintetos y otros conjuntos para cuerdas o con piano no fueron tan utilizados.


La Sinfonía es la personificación más clara de la imaginativa liberal de los compositores románticos, la forma musical capital. En este momento histórico trata de superar las barreras formales anteriores para volverse grandiosa.



Otro gran género orquestal que se realza es el concierto, lo que favorece al desarrollo del virtuosismo. Concretamente, el concierto más popular fue el de piano, aunque no se escribieron muchos. Lo mismo ocurre con el de violín, no se llegaron a componer muchos, y aún menos para otros instrumentos como el cello o para varios de ellos a su vez como el triple concierto para piano, violín y chelo de Beethoven.


Pero aparte de estos cambios en los géneros que ya llevaban décadas o incluso siglos de evolución, aparecieron el poema sinfónico y la obertura. El primero (creado por Franz Liszt) tiene su origen en la segunda. La intención de ambos es descriptiva, ya sea con un sentimiento o con un paisaje. Generalmente es de un solo movimiento y está escrito para orquesta, aunque no necesariamente ha de ser así.


Como ya se ha dicho, los compositores románticos se interesaron por la música del pasado, reviviendo la obra de J.S. Bach, entre otros, lo que animó a muchos músicos a interpretarla o incluso a utilizar sus formas, como hizo Brahms.

Las composiciones vocales religiosas fueron más bien pocas. El género más explotado del periodo fue la misa, y la cantata pasó a tener más un carácter profano.

El papa Pio X propuso el canto llano como “el más perfecto modelo de la música sacra” y se empezó una gran recuperación de toda la música antigua posible.


Incluso en la minoría, la música eclesiástica de este periodo recurrió a lo teatral, a lo grandioso. La misma sensibilidad literaria y artística de la música instrumental favoreció a la expansión del repertorio sagrado. Hubo músicos que querían utilizar los logros del lenguaje moderno para las obras sacras, pero había otros partidarios de las obras antiguas (Bach, Haendel, Palestrina).

En la próxima y ultima entrada sobre los periodos históricos hablaremos sobre la Ópera Romántica (por cuestiones de espacio) y de las Escuelas Nacionales que surgieron en Europa. Por ello, en la siguiente lista de compositores no se incluyen los operistas.

Compositores más importantes del periodo y su mayor obra

Niccolò Paganini (1782-1840): 24 Caprichos y Concierto para Violín No.1
Franz Schubert (1797-1828): Sinfonía No.8 "Inacabada"
Ludwig van Beethoven (1770-1827): Sinfonía No.9 "Coral"
Hector Berlioz (1803-1869): Sinfonía Fantástica & Gran Misa de los Muertos
Johann Strauss (1804-1849): Marcha Radetzky & otras danzas
Felix Mendelsshon (1809-1847): Sueño de una Noche de Verano
Frédéric Chopin (1810-1849): Nocturnos, Preludios y Sonata para Piano "Marcha Fúnebre"
Robert Schumann (1810-1856): Concierto para Piano en A menor
Franz Liszt (1811-1886): Sonata para Piano S.178 & Rapsodias Húngaras
Anton Bruckner (1824-1896): Sinfonía No.8 "Apocaliptica" & 9
Johannes Brahms (1833-1897): Sinfonía No.1 y Réquiem Alemán
Piotr Ilyich Chaikovski (1840-1893): Sinfonía No.6 "Patética", Concierto para Piano No.1 & Ballet El Lago de los Cisnes.
Gustav Mahler (1860-1911): Sinfonía No.5
Richard Strauss (1864-1949): "Así habló Zarathustra"

Fuentes Bibliográficas

Marie-Claire Beltrando-Patier. (1996). Historia de la Música, La música occidental desde la Edad Media hasta nuestros días. España: Espasa Calpe S.A.
John Burrows. (2006) Música Clásica. España: Espasa Calpe S.A.