Hay que estar bien alerta con todo intento de enmarcar un conflicto como es en este caso el de género, especialmente si se trata de uno con apariencia progresista.
La trabajadora actual vive en un mundo globalizado, víctima de la precariedad laboral y solo pudiendo sentirse parte de un proceso económico, sin una identidad cultural a la que aferrarse.
El sexo, el género, binario o no binario, fluido... tras el auge de luchas como la feminista o por la libertad sexual, muchas han sido las realidades de este tipo que se han puesto sobre la mesa.
Es importante retener 2 concepciones de la naturaleza del ser humano, la social, que constituye la base de la educación, y la política, que contribuye a la extensión de susodicha educación; porque, son 2 elementos fundamentales en la construcción y salud del sistema democrático.
A lo largo de sus años como cineasta, Sergio Leone solamente dirigió siete filmes , aunque realizara numerosas sustituciones que le fueron premiadas económicamente y de modo reputacional, nunca apareció en los títulos de esos filmes como director, por lo que esas siete obras son su legado oficial, y en él nos basamos. Aquí recogemos, de entre esos siete filmes, los cinco que ningún cinéfilo puede dejar de ver. Esas cinco películas dirigidas por Sergio Leone que marcan un antes y un después en el género del western y que constituyen el legado de un cineasta merecidamente elogiado. Son estas:
- Por un puñado de dólares (Per un pugno di dollari, 1964)
Primer Western -o Spaghetti Western- dirigido por Sergio Leone. Se la conoce como la primera cinta representativa de su estilo y como la que inició su famosa Trilogía del dólar. Se trata de un remake del clásico Yojimbô(El mercenario) (ídem, 1961) de Akira Kurosawa ambientado en México y realizado con un presupuesto realmente bajo. Fue un film polémico, pues sus similitudes con el film nipón original son remarcables y la productora no había pagado ningún tipo de derechos que les permitieran realizar una versión.
-La muerte tenía un precio (Per qualche dollaro in più, 1965)
La muerte tenía un precio es una suerte de continuación de la cinta anteriormente citada. Con el mismo protagonista, interpretado por Clint Eastwood, y con unas formas similares -aunque esta vez con un mayor presupuesto-, Leone ejecuta un clásico acerca de la venganza que terminó por encumbrarlo como una estrella del género. Sin duda, esta cinta supera a la anterior y define con mayor claridad los rasgos característicos del cine del romano.
-El bueno, el feo y el malo (Il buono, il brutto, il cattivo, 1966)
Película que cierra la Trilogía del dólar y que encumbró definitivamente a su autor. También fue la última colaboración entre Leone y Eastwood. Los tres personajes que se anuncian ya en el título son unos cazadores de recompensas que deciden unir sus fuerzas en una alianza que, como era de prever, será débil y estará sujeta a los azares del destino. Todo un clásico del género con abundantes toques cómicos y, eso si, muchísimos primeros planos.
-Hasta que llegó su hora (C'era una volta il west, 1968)
Hasta que llegó su hora es el último gran Western de Sergio Leone, si bien es cierto que tres años después aún dirigiría otra titulado ¡Agáchate, maldito! (Giù la testa, 1971). A nuestro entender, este filme plagado de estrellas de la interpretación -Henry Fonda, Claudia Cardinale, Charles Bronson o Jason Robards- constituye la obra más redonda y representativa de su autor, por lo que la podríamos denominar su obra cumbre, aunque muchos atribuyen este papel a su último trabajo, del que hablaremos a continuación. -Érase una vez en América (Once Upon A Time In America, 1984)
Mastodóntica cinta -más de cuatro horas de duración- que sigue la vida de unos jóvenes muchachos des de los suburbios de Nueva York de principios de Siglo hasta los gloriosos años veinte en que, mediante negocios sucios, consiguen llegar a lo más alto del escalafón social norteamericano. Esta película fue considerada por su autor como la obra maestra que siempre había soñado hacer, y sin duda se encuentra muy alejada de todo lo que Leone había ofrecido con anterioridad. Lo cierto es que se trata de un filme irregular, pues si bien su primera hora y media es sin duda lo mejor de Leone y todo un hito en la historia del cine, la segunda parte de la trama pierde considerablemente interés.
Sergio Leone nació en Roma, Italia, el 3 de Enero de 1929, y falleció a causa de un ataque al corazón en esa misma ciudad el 30 de Abril de 1989. Su breve trayectoria tras las cámaras -tan solo aparece como director jefe en los créditos de siete filmes- le valió para ganarse la fama mundial, lanzar el subgénero del spaghetti westernal estrellato y realizar una personal incursión al mundo de la mafia mediante su magna obra -que no la mejor- Érase una vez en América (Once Upon A Time In America, 1984).
No es sencillo ganarse la fama y la reputación que hoy en día atesoran a Sergio Leone. A menudo, además de un gran talento, requiere de acierto y fortuna, y sin duda estos dos elementos acompañaron al cineasta italiano durante sus primeros años tras las cámaras. Aunque el éxito comercial del romano y su reconocimiento se puedan considerar algo desproporcionados, no hay duda de que Leone fue un cineasta mayúsculo que trabajó bajo una visión personal y efectiva del cine y que consiguió legarnos obras imprescindibles dentro del western moderno.
Leone nació en el seno de una familia muy cercana al mundo de la gran pantalla. Su padre, Vincenzo Leone, había sido uno de los directores pioneros de la cinematografía italiana bajo el seudónimo de Roberto Roberti -aunque cuando Sergio nació su carrera ya estaba acabada- y su madre, conocida como Bice Valerian, había sido una de las musas del cine italiano de los años veinte. Siendo así, no es de extrañar el temprano interés de Leone por el mundo de la cámara, aunque su padre siempre fue reacio a que su hijo adoptara su misma profesión, por lo que llegó a matricularlo en derecho.
Pese a ello, Leone abandonó sus estudios y aprovechó las amistades de su padre para introducirse en el mundillo como ayudante o actor amateur. En esos primeros años, el director trabajó a las órdenes de grandes nombres del panorama nacional, como Vittorio de Sica, pero también de algunos maestros del Hollywood clásico como William Wyler, Fred Zinnemann o Robert Wise, aprovechando que estos rodaban superproducciones de carácter histórico en Cinecittà.
Tras suplir a otros directores y trabajar como guionista en sendas producciones, Leone se ganó el favor de la industria y en 1961 consiguió dirigir su primer filme en solitario, una película histórica de aventuras de escaso interés, El Coloso de Rodas (Il Colosso di Rodi, 1961). Pero, tras un par de años más como ayudante, al director italiano le surgió la posibilidad de dirigir un Western de bajo presupuesto que acabaría convirtiéndose en el primer paso de su Trilogía del dólar y el primero de sus cinco clásicos de dicho género. Así, Leone dirige Por un puñado de dólares (Per un pugno di dollari, 1964), un remake del clásico de Akira Kurosawa Yojimbo (ídem, 1961), film que, además del éxito, le traería ciertas complicaciones judiciales. Con La muerte tenía un precio (Per qualche dollaro in più, 1964) y El bueno, el feo y el malo (Il buono, il brutto, il cattivo, 1966) Leone alcanza definitivamente el estatus de maestro, lanza al estrellato un subgénero hasta entonces menospreciado como el spaghetti western y demuestra ser un cineasta con personalidad y talento. También Clint Eastwood se benefició del éxito de estas cintas en su faceta de actor, hasta entonces muy centrada en el ámbito televisivo. En 1968 Leone filma su obra maestra, un western titulado Hasta que llegó su hora (C'era una volta il west) en el que su nuevo estatus queda patente al poder contar con verdaderas estrellas del panorama cinematográfico en los papeles principales: Henry Fonda, Charles Bronson y Claudia Cardinale. Éste fue el penúltimo western de Leone, que de 1971 en adelante centró todos sus esfuerzos en poder llevar a cabo su proyecto soñado, un drama criminal ambientado en el Nueva York de principios de Siglo: Érase una vez en América (Once Upon A Time In America, 1984). Una obra que, aunque va de más a menos, resulta mayúscula y que nuevamente comportó numerosos conflictos judiciales a su creador, pues sus más de cuatro horas de duración fueron recortadas por las distribuidoras estadounidenses, causando grandes disgustos al director romano, que la consideraba su obra definitiva. El cineasta murió en 1989 debido a un ataque al corazón mientras preparaba un nuevo proyecto, en esta ocasión sobre la batalla de Leningrado.
El cine de Leone se recuerda aún gracias a su inigualable épica, a las composiciones de Ennio Morricone y la fotografía de Tonino Delli Colli, que siempre le acompañaron, a su pausado ritmo narrativo que derivaba en escenas de tremenda acción y sobretodo por esos extremos primeros planos que tanto caracterizaron sus cintas. Sin Leone no podemos entender la fama del spaghetti western, ni el hecho de que este género suscite aún hoy el interés de tantos cinéfilos y cineastas, como el caso de Quentin Tarantino. Sergio Leone es, en definitiva, un referente del cine moderno cuyas obras son revisadas una y otra vez sin perder un ápice de interés.
R. Fortuna: Little Richard - Here's Little Richard
Here's Little Richard es producto de la maqueta que envió dos años antes a Specialty Records, éstos tras escucharla le proporcionarían una sesión de grabación con la condición de acudir como solista (abandonando su grupo, The Upsetters). Dicho acuerdo se transformó en un LP de doce canciones del cual surgieron éxitos como la adaptada Tutti Frutti, Ready Teddy, Long Tall Sally o Rip It Up. Por supuesto, podemos encontrarlo en la lista de los mejores 500 discos de la historia (en el 50º puesto) de la Rolling Stone o en el libro 1001 Albums You Must Hear Before You Die.
Viri: Chuck Berry - After School Session
After School Session fue el álbum debut del mito del Rock Chuck Berry. En su primer trabajo, Berry recopila muchos de los singles lanzados años antes y realiza nuevas aportaciones en el que es considerado uno de sus mejores CD's -solamente superado por Chuck Berry is on Top, según nuestra opinión. Destacan en él la presencia de algunos clásicos y principalmente la canción que adjuntamos a continuación:
Ron Delillo: Johnny Cash: Johnny Cash with his hot and blue guitar
Y llegó Johnny Cash. El hombre de negro publicó su primer LP en 1957 con la discográfica Sun Records después de que éstos le rechazaran buscando un sonido más comercial. En Johnny Cash with his hot and blue guitar encontramos algunas de las mejores canciones de la carrera de Johnny Cash: I walk the line, Cry, Cry, Cry o Folsom Prison Blues. Cash publicó el disco con 25 años y empezaría aquí una carrera de casi medio siglo, con altos y bajos, pero con uno de los sonidos más característicos de la historia de la música.
Consagrado como el mayor logro musical de Purcell, esta composición operística es la única completa que compuso, aunque se trata de una obra de corta duración (únicamente una hora). La costumbre de la época en Inglaterra era componer semióperas, piezas que mezclaban la ópera con ballets, marchas y música de escena, entre otras.
En la actualidad goza de gran fama, mayormente por su aria 'When I am Laid in Earth' en la que, después de que el héroe troyano Eneas deje la ciudad de Cartago, muestra el tormento de Dido y, sabiendo que no puede vivir sin Eneas, decide suicidarse inmolándose en una hoguera. Esta aria está considera como una de las piezas más tristes de la historia de la música.
Música para la reina Mary
Dentro de sus composiciones vocales no operísticas destacan dos obras escritas para la reina Mary de Inglaterra:
- Music for the Funeral of Queen Mary
Música solemne compuesta para los funerales de la reina. Tras su interpretación se convirtió en la música oficial para los funerales reales de toda Inglaterra.
Ésta composición es desde entonces todo un icono en la cultura Europea, al igual que la novena sinfonía de Beethoven o el inacabado Réquiem de Mozart, aunque es mayormente conocida por formar parte de la banda sonora de la película 'La Naranja Mecánica' de Stanley Kubrick.
- Oda 'Come Ye Sons of Art' Z.323
Al ser el compositor favorito del rey William II, Purcell recibió el trabajo de componer odas para los aniversarios de la reina Mary.
Esta es concretamente la sexta y última oda que compuso en 1694 para la reina, puesto que esta murió el mismo año.
4 Suites Orquestrales para Teatro
De su música incidental para teatro surgen 4 excelentes suites bajo los nombres 'Abdelazer, or the Moor's Revenge', 'The Married Beau', 'The Gordian Knot Untied' y 'The Virtuous Wife'.
La más interpretada es la llamada 'Abdelazer, or the Moor's Revenge'.
Fantasías para Violas de Gamba
Colección de 15 fantasías de severa complejidad y profundidad para conjuntos de tres a siete violas de gamba. La interpretación más reconocida es la de Jordi Savall.
Semiópera 'La Reina de las Hadas'
Escrita en los prolíficos últimos años del autor para una adaptación teatral de la obra 'Sueño de una Noche de Verano' de W. Shakespeare.
Por la gran cantidad de música de escena que contiene, pasó de ser música incidental para teatro a ser una semiópera de larga extensión (más de dos horas) con cinco actos y repleta de canciones, masques, ballet y música de escena intercaladas con diálogo hablado.
A Choice Collection of Lessons for the Harpsichord or Spinnet & Twelve Lessons from 'Musick's Handmaid'
De su producción para teclado nos quedamos con estas dos colecciones de obras de carácter pedagógico para futuros intérpretes del teclado. La primera de estas contiene 8 suites.
La suite es una forma musical compuesta por movimientos breves en los cuales se exponen diversos tipos de danza. En la época de Purcell esta forma aún se encontraba en una etapa primitiva, hecho apreciable por la corta duración y la escasez de movimientos (tres únicamente) de cada suite.
"Así como la poesía es la armonía de las palabras, la música lo es de las notas; y así como la poesía es la elevación de la prosa y la oratoria, la música es también la exaltación de la poesía"
Henry Purcell, nacido en 1659 y fallecido en 1695, fue el compositor más importante nacido en Inglaterra durante el período barroco.
La abundante obra de Henry Purcell (más de 500 composiciones), que recorre gran número de géneros y formas -desde suites orquestales y para teclado hasta operas, himnos, música incidental para teatro, cánones, y piezas para órgano- supone junto con la del Italiano Arcangelo Corelli, una de las primeras grandes victorias de la música instrumental orquestal. Hasta la época de Purcell (el compositor inglés es anterior cronológicamente a Antonio Vivaldi y a Georg Philipp Telemann), el conjunto de composiciones barrocas se podía resumir mayormente en obras vocales (óperas, himnos, misas y otros géneros sacrales) y instrumentales para clave o órgano. Las obras para instrumentos de cuerda y para conjuntos eran muy escasas, con la excepción de piezas para el recuerdo, como el caso del famoso canon de Johann Pachelbel o las sonatas para conjunto de Dietrich Buxtehude.
Purcell creó un estilo propio inglés incorporando elementos estilísticos de música de otras nacionalidades. Tras su muerte, Georg.Friderich Handel -el compositor alemán "fichado" por la corte británica- se convirtió en el heredero principal de éste, exprimiéndolo y elevándolo a nuevas cotas.
Durante su vida siempre estuvo dentro de círculos exaltados de la iglesia y de la corte. Se cree que empezó a componer a los nueve años, pero su primera composición conservada data del 1670, contando con que las fechas de sus composiciones suelen ser algo inciertas. Empezó su carrera interpretativa como corista de la capilla real a los diez años, siguiéndola como miembro del séquito musical de Carlos II de Inglaterra con catorce, compositor de la corte a los dieciocho y como organista en la abadía de Westminster a los veinte años.
En su plenitud artística, tras el inicio de su andadura en el cargo de organista, contrajo matrimonio (1682) y al año siguiente fue nombrado organista de la capilla real y constructor de órganos reales. Desde aquel momento se dedicó por completo a la composición de música sacra durante más de siete años.
En 1689 Purcell compondría su obra magna y una de las más importantes del género en la época, la ópera 'Dido y Eneas', todo un hito de la música dramática inglesa.
A la temprana edad de 36 años, Henry Purcell fallece, justo en la cumbre de su fama. Es enterrado en la abadía de Westminster debajo del órgano que tanto tocó. Su epitafio reza: "Aquí yace el honorable Henry Purcell, quien dejó esta vida y ha ido a ese único lugar bendito donde su armonía puede ser superada".
"No hay soledad más grande que la del samurái, a excepción de aquella del tigre en la jungla... quizás..."
El código Bushido
Jeff Costello (Alain Delon) es un experto asesino a sueldo que realiza su trabajo de forma meticulosa y que elabora unas sofisticadas coartadas que le dejan fuera de toda sospecha. Sin embargo una noche, tras matar a sangre fría al dueño de un club nocturno, es visto por numerosos testigos, y pese a que su férrea coartada debería alejarle de los focos, tanto la policía como aquellos que le contrataron, preocupados por si Costello habla más de la cuenta, intentaran darle caza.
En un inicio memorable, el cineasta francés Jean-Pierre Melville nos presenta al personaje en torno al cual girará la totalidad de este filme, su indiscutible obra maestra. En la primera escena, junto a los títulos iniciales, vemos en un plano fijo una lúgubre y grisácea habitación en la que Jeff Costello, con la única compañía de un canario que no deja de cantar, yace sobre su cama mientras fuma un cigarro. Esta es una muestra de la desnudez que caracteriza la cinta y el carácter artístico de su creador. Más tarde vemos como Costello roba un coche, visita a un amigo que le proporciona una nueva matrícula para el mismo y elabora su coartada junto a la única mujer que forma parte de su vida. Todo ello, eso sí, en un rotundo silencio y un ascetismo formal solo a la altura de los grandes maestros del cine.
Desde la interpretación del gran Alain Delon, hasta el detallado uso del color característico del cineasta parisino, pasando por la fenomenal ambientación y el elaborado guión; El silencio de un hombre es una obra maestra del cine negro y policíaco que marcó no solo la cima artística de Melville, sino un punto de referencia para numerosos artistas que décadas más tarde han abordado dichos géneros. Hablamos de nombres de la entidad de John Woo, Jim Jarmusch, Bernardo Bertolucci, Takeshi Kitano, Michael Mann o el propio Martin Scorsese.
Esto que comentamos nos permite poner de relieve la grandeza que tiene esta cinta en términos históricos, pero además resulta indiscutible su total vigencia narrativa y formal. Un elocuente silencio acompaña la práctica totalidad de un filme cuya melancólica atmósfera engrandece su trágico contenido.
Sin duda, el absorbente personaje principal, un asesino sin escrúpulos que sin embargo simpatiza con el público por su soledad y su inseparable destino, tiene gran parte de culpa en el hecho que el filme funcione como un reloj. Se trata de, como ya hemos dicho, un hombre meticuloso hasta la saciedad., una suerte de lobo solitario cuya oscura vida parece no tener ningún sentido ni fin.
Más allá de todos los elementos ya comentados, merece la pena destacar la banda sonora de François de Roubaix, plagada de melodías jazzísticas, o la excelente fotografía de Henri Decae (Los 400 golpes, Ascensor para el cadalso...). Así pues, Le samouraï es una de esas joyas ineludibles del cine francés -una de tantas. Una pieza de arte para gozar una y otra vez. Finalmente, queremos mencionar dos escenas que creemos constituyen los momentos de máxima tensión del filme: Por un lado, el reconocimiento policial de todos los sospechosos, en el que vemos venir que Costello tendrá muchos problemas con la policía a lo largo del metraje, y por el otro la persecución en el metro, donde hasta cincuenta agentes y veinte colaboradores tratan de dar caza al protagonista en el mítico subsuelo parisino.
La viola de gamba es un instrumento de cuerda de arco con trastes mayormente usado durante el renacimiento tardío y el barroco. Tiene un aspecto similar al del violonchelo pero posee seis cuerdas (el modelo más usado) y para su uso el músico la ubica entre sus piernas -de ahí su nombre (en italiano se traduce como 'viola de pierna'). Al ser considerado un instrumento aristocrático su interpretación era llevada a cabo frecuentemente por mujeres.
La aparición del violonchelo supuso la desaparición progresiva de la viola de gamba como instrumento predominante entre los graves de los conjuntos de cuerda, dada la fuerza sonora de su rival. Aún siendo el violonchelo un instrumento con un sonido más perfecto, la melancolía que produce el instrumento que nos ocupa hoy es incomparable.
Como con casi todos los instrumentos antiguos, durante el siglo XX se produjo una recuperación de éste. Surgieron grandes violagambistas, como Jordi Savall o Paolo Pandolfo, los cuales rescataron obras hasta el momento desconocidas y las grabaron para el deleite de los oyentes. A continuación expongo brevemente cuales fueron los grandes compositores para viola de gamba de la historia.
Monsieur de Saint-Colombe
Se conocen pocos datos sobre este compositor y violagambista francés, incluso no se sabe con certeza cual era su nombre de pila. La información de la que disponemos hoy en día proviene mayoritariamente de sus alumnos, de entre los cuales el más notable fue Marin Marais.
Es considerado el mejor violagambista de la historia y es probable que hubiera sido el introductor de una séptima cuerda en el instrumento y que él mismo mejorara la técnica del uso del arco.
El escritor francés Pascal Quignard escribió en 1991 una novela en la que cuenta el aprendizaje de Marin Marais en la casa del misterioso Monsier de Saint-Colombe. Más tarde esta novela fue adaptada al cine de forma sobresaliente (musicalmente hablando) por Alain Resnais.
Marin Marais
Nacido en 1656 y fallecido en 1728, Marin Marais fue un compositor y violagambista francés discupulo de Jean-Baptiste Lully y de Monsieur de Saint-Colombe.
Marais aprendió a tocar el violín tan deprisa que superó a su maestro en apenas seis meses. Pronto se unió a la Ópera de París y emprendió su carrera como compositor y virtuoso pionero de la viola. En 1676 fue contratado como músico de la corte de Luis XIV de Francia.
Compuso más de 600 obras para viole (nombre alternativo del instrumento) agrupadas en 5 libros de piezas, muy imaginativas y variadas.
Karl Friedrich Abel
Nacido en 1723 y fallecido en 1787, K.F. Abel fue un compositor y violagambista alemán del clasicismo, siendo él el mayor exponente de dicho instrumento en aquella época. Fue músico de cámara de la reina Charlotte en Inglaterra.
Abel fue discupulo de J.S. Bach en Leipzig y entabló amistad con su hijo Johann Christian Bach, con el cual protagonizó una larga serie de importantes conciertos en Londres.
Hasta el siglo VII Siria fue territorio cristiano. En el lugar donde se construyó la gran mezquita de Damasco había una basílica dedicada a San Juan Bautista, construida por Teodosio, el último emperador que controló las dos partes del Imperio bizantino. Anteriormente, estuvieron los romanos y los arameos, civilizaciones que dejaron restos en este punto. Tras el Imperio Bizantino llegaron los omeyas musulmanes, que hicieron de Damasco su capital entre el año 661 y el 750 y que construyeron esta mezquita aprovechando los materiales antiguos. Fue mandada construir por Al Walid I en el 705-706 y se terminó en el 715. No se conservan planos originales así que lo que conocemos es de la reconstrucción de 1894 tras un incendio.
Se mantienen los muros originales de 100 x 157 metros lo que la convierte en una de las mezquitas más grandes del mundo y su distribución influyó en edificios posteriores como la mezquita de Córdoba. Reproduce la casa de Mahoma con una zona central, el patio, alrededor de la que se distribuyen los distintos espacios. El patio está construido a base de pilares y un doble piso de columnas y arcos. Además de ser un lugar de paso, hay reuniones, se reza, se medita e incluso se descansa. En él hay tres construcciones pequeñas: la primera es la Cúpula del Tesoro, lugar donde se guardaba el dinero y las posesiones de la mezquita. Es octogonal, con columnas de origen romano y tiene decoración de mosaicos. La segunda es un espacio de planta cuadrada con techumbre de madera y se denomina la Cúpula de las Abluciones. Por último, está la Cúpula de los Relojes, restaurada en el siglo XVIII.
Hay también tres minaretes, muy especiales, pues al contrario que en el resto de mezquitas, no son circulares, sino cuadrados o hexagonales. El más antiguo se conoce como el Minarete de la Novia, del siglo XI la estructura y del XII el remate. El segundo es el de Qayt Bey, nombre del sultán que lo mando construir en 1488. El último es llamado Minarete Blanco o de Jesús, reconstruido en el período otomano pero original del siglo XIII. Dice la tradición musulmana que el día del Juicio Final, Jesús, profeta en el Islam, volvería y que desde este minarete y diría 'Alá es el único dios y Mahoma es su profeta'
El interior de la mezquita está dividido en tres naves divididas por dos hileras de columnas con arcos en doble piso. Es probable que las arquerías fueran las originales basilicales. En el nicho de la oración o mihrab se encuentra la cúpula del Águila. En otro espacio está el sepulcro de la cabeza de San Juan Bautista. El pequeño panteón imita un edificio de dos alturas y se le venera tanto en el Islam como en el cristianismo. En otra sala más está enterrado el nieto de Mahoma, Husein bin Ali, figura clave en la rama islámica del chiísmo. Se diferencia del típico arte suní por los colores y los espejos. En el exterior y coincidiendo con los muros del templo romano de Júpiter se alza la tumba de Saladino, uno de los sultanes más famosos de la historia.
Esta mezquita es famosa por sus mosaicos de tradición bizantina pues es posible que los realizaran artistas de Constantinopla. Son muy diferentes a los gustos presentes en el arte islámico. En las paredes del patio y las de la Cúpula del Tesoro vemos una posible representación del Edén, con un camino de agua, árboles y edificios de estilo romano de diferentes alturas. La decoración vegetal es lo que prolifera con más fuerza, pues el Islam prohíbe la representación humana y animal en los templos, en especial la de Mahoma o Alá aunque en otras zonas islámicas esta corriente no tuvo tanto éxito. Algunos de los materiales utilizados fueron el mármol, el cristal de color, el oro y la plata. Esta mezquita tuvo el mosaico de oro más grande del mundo que llegaba a ocupar 4000 m2.
Aunque no sé en qué estado se encuentra actualmente la mezquita, imagino que, a causa de la guerra que asola Siria, mucho de lo que se puede apreciar en estas fotos ya solo existe parcialmente. Antes que nada van las pérdidas humanas y económicas, pero sí es verdad que en las guerras de Oriente Medio se ha destruido mucho del patrimonio histórico y artístico. No solo por los bombardeos o los disparos, también por la presencia de tanques y bases militares extranjeras. Los americanos, por ejemplo, destruyeron ruinas mesopotámicas en Irak. El conflicto sirio está siendo devastador en todos los sentidos y en el aspecto artístico, Alepo ha sido una de las ciudades más afectadas ya que su gran mezquita, construida por los omeyas, ha sido destruida.
Quiero repetir que, antes que cualquier tipo de destrucción material, van las pérdidas humanas y los efectos traumáticos de una guerra, pero como futura historiadora y amante del arte no deja de preocuparme todo lo que se está perdiendo en estos cuatro años de conflictos. Conflictos que llevan abiertos desde la época en la que se realizó esta mezquita, entre los sunníes, rama mayoritaria del Islam y los chiíes. Sus problemas empezaron con la elección del sucesor de Mahoma en el siglo VI y llegan hasta hoy, mezclado con otros problemas contemporáneos. Espero de corazón que un país devastado por la guerra algún día se recupere, aunque los 220.000 muertos, los millones de refugiados y la multitud de supervivientes en depresión y con trastornos psicológicos no se olvidan.
A menudo considerado como la figura central del romanticismo, Franz Liszt fue el virtuosismo encarnado. Incorporó la virtuosidad como elemento dramático esencial en la música. Su infatigable trabajo ilustró a las posteriores generaciones de pianistas y compositores convirtiéndose en uno de los autores más alabados de todos los tiempos.
La fuerza de la música instrumental permite irradiar las emociones y el brillo en su propio carácter, sin presumir de mostrar como real o imaginario ninguna representación.
Mi mente y mis dedos han trabajado como condenados.
A menos que me vuelva loco, hallaréis un artista en mí.
Llevo una profunda tristeza en el corazón que de vez en cuando debe estallar en sonido.
El arte, la más inútil de las inutilidades a los ojos del positivismo, reclama, como si fuera una planta exótica en la humanidad, coyunturas favorables para aclimatarse.
Eternidad en tus brazos...Cielo, infierno, todo, todo en ti y de nuevo en ti...Oh, déjame loco, insano... ¡La común, prudente estrecha realidad, ya no es suficiente por más tiempo, debemos vivir con toda nuestra vivencia, amor, y toda nuestra congoja!
William Harford (Tom Cruise) es un médico neoyorquino cuya vida es aparentemente perfecta. Está casado con una bella mujer llamada Alice (Nicole Kidman) y tiene una hija pequeña. Todo se desploma al asistir a una fiesta de un respetado y poderoso amigo suyo (Sidney Pollack). En ella, marido y mujer flirtean con otras personas, hecho que les lleva a discutir acerca de su matrimonio. En este momento, Alice confesará que hace poco estuvo apunto de abandonar a su marido e hija por un completo desconocido.
Incapaz de asumir lo que su mujer le ha contado y corrompido por los celos, William iniciará una aventura nocturna dominada por el sexo y el erotismo. El misterio se descubrirá ante él cuando un antiguo compañero de la facultad le hable de unas fiestas secretas celebradas en una mansión de las afueras de la ciudad, donde un grupo de hombres y mujeres disfrazados dan rienda suelta a todas sus fantasías sexuales. El Doctor Harford conseguirá colarse en la exclusiva celebración, pero pronto será descubierto por los miembros de la secta.
Último film dirigido por el legendario cineasta norteamericano Stanley Kubrick, quien murió antes de llegar a verlo estrenado. Aunque situado en la ciudad de Nueva York, el filme fue rodado en su mayor parte en el Reino Unido, por lo que los exteriores que vemos a lo largo del metraje son magistrales recreaciones de la gran ciudad. La película, como suele ocurrir en el cine de Kubrick, nos habla de temas universales: los celos, la confianza, el miedo, el deseo etc. La cinta fue inspirada por una obra de Arthur Schnitzler que permitió al cineasta y su colaborador Frederic Raphael construir un sólido guión en el que, realmente, escasean los acontecimientos, pues lo realmente importante se encuentra, en todo momento, en la psique de los protagonistas.
La película en su conjunto -pensada al milímetro, como no- se encuentra rodeada por un halo de misterio que no deja de ir in crescendo a lo largo del filme y que encuentra su punto culminante en la larga y brillante escena de la mansión, uno de los momentos más destacables del cine de Kubrick, que ya es decir. Tanto la magistral puesta en escena como el elaborado desarrollo del guión y los personajes de William y Alice elevan el filme a la categoría de obra maestra. La música, uno de los puntos fuertes de la película, corrió a cargo de Jocelyn Pook, y se encuentra acompañada por piezas de autores tan reconocidos como Dmitri Shostakovich, György Ligeti o Franz Liszt, en una nueva demostración de lo determinante que puede ser una buena selección musical -y uso de ésta- para la culminación de una obra cinematográfica. Stanley Kubrick siempre fue uno de los mejores en ello.
Son muchos los aspectos que podríamos destacar de Eyes Wide Shut. Por ejemplo, la labor de vestuario y la escenografía, el uso simbólico del color o las referencias intelectuales del film. En cuanto a sus escenas, más allá del momento álgido que supone la estancia del Doctor Harford en la mansión, podemos hacer alusión a la discusión matrimonial que inicia todo el conflicto, digna del mejor Bergman, a los paseos del protagonista por las oscuras calles neoyorquinas o a sus visitas a la tienda de disfraces, prácticamente surrealistas.
En definitiva, una fascinante obra maestra que se erigió, a nuestro entender, en una de las cintas de referencia de su aclamado director.
Muy a menudo las expectativas previas juegan una mala pasada a ciertos filmes, y ese mismo fue también el caso de Eyes Wide Shut, que fue considerada por la mayor parte de los críticos como una obra fallida y que fue igualmente rechazada por el público. Una injusticia sin igual. Estamos ante una obra indispensable de finales de siglo y resulta necesario reivindicarla. Como se suele decir, el tiempo la pondrá en su lugar.
Hoy ve la luz Stay War, un trabajo audiovisual dirigido y editado por IAMTOMMY a modo de adelanto del próximo álbum de Kaixo, SNIFF SNIFF.
Aprovechando la ocasión adjuntamos, además del videoclip, la entrevista que le realizamos en base a Drop Out, su trabajo más característico, en mi opinión, hasta la fecha. Ha sido una interview muy viva en todos los sentidos posibles, ha pasado un año desde que lancé la primera pregunta y con el tiempo tanto las propias preguntas como las respuestas y su significado han ido variando inevitablemente. Solo espero que os resulte tan interesante como le resultó al menda.
Vox Ultra: Para el desinformado que no te conozca ¿quién es Kaixo?
Kaixo: Es el sumerio que llevo dentro, es ese personaje que hace que siga vivo. Cuando tenía 14 años me dijeron que a mi hermano, que era hiperactivo (entre otras muchas cosas graciosas y bonitas), le habían diagnosticado una enfermedad degenerativa. Mi respuesta fue sacar algo más fuerte que cualquier cosa, también excesivamente loco muchas veces y un cacho de pan realmente. Saque una parte de ti, que normalmente se forma cuando te haces adulto; para mi ver la figura del futuro negra en ese momento, me hizo cambiar mi forma de ver el mundo y mi forma de entenderlo; hasta el día de hoy. Creo que empatizo mucho con las personas y las vivencias de los demás, me gusta escuchar y conectar; eso también me hace ser excesivamente autodestructivo conmigo mismo, quiero como salvar a los demás. Pero bueno sino puede ser, nos vamos de fiesta y ya esta, nos anestesiamos, arreglamos con ver salir el sol al día siguiente en una terraza del centro de cualquier pueblo o ciudad. Por cierto mi hermano es un amor, sigue aquí, no puede hablar casi nada, pero bueno habla con la mirada.
VU: El stalkeo es un must, e investigando en tu pasado encontramos a Kaixo Sama ¿quién era Kaixo Sama, y qué queda de él ahora?
K: Kaixo soy más yo, más mi forma de entender la vida. Me da mucho asco lo políticamente correcto, lo burocrático, lo excesivamente democrático, creo que nos convierten en mentes sin frecuencias a medida que pasan los años. Sama es ese Kaixo pero más adolescente, más inocente, más bebida, más risas (que ahora también) pero no es lo mismo. Soy mucho más espiritual ahora, y también más crítico conmigo mismo, antes tenía más miedos, ahora solo tengo consecuencias; los miedos me dan igual, forma parte del humano medio, yo he decidido no querer el “Pack” coche-piva-casa-perro-hijos-prozak-gintonic a las 12H un domingo hablando de fútbol. Considero a las personas únicas e intransferibles, hay mucha gente que se ha olvidado; Kaixo es un escudo contra eso, Sama es la inocencia del pedo de 4 de la mañana mezclado con molly, amándolo todo.
VU: Seguimos en plan stalker y vemos que en FB tienes Tenrikyō como religión ¿Qué es Tenrikyō y por qué?
K: El Tenrikyō apareció en mi cuando viví con un japonés hace un par de años, ellos creen en la causalidad, es decir, que las cosas pasan por algún motivo (causa y efecto). Yo digo fe de Tenrikyō porque ese tío creyó en mí desde el minuto uno. Es una religión que nació después de las bombas atómicas de la II Guerra Mundial.
Imagínate, tras el infierno que vivieron en Japón que se desarrolle una religión basada en la causalidad, es brutal. Creen que algo ocurre por un motivo en base a algo que tu has hecho, como una justicia divina; como si el universo estuviera ordenado. No es que crea totalmente en esto, pero si que me ayudo en esa época (cuando escribí Drop Out), como a alejar mis demonios, aunque no a luchar contra ellos; en esa época también leí y vi conferencias de Leary, y bueno es un punto más de conocer tu yo interior, de conocerte en definitiva; pero me puedes creer cuando te digo que es solo la primera piedra de todo lo que hay en nuestra mente. Son las primeras señales, la primera fase; mucho más hay hasta llegar a la Cuarta Fase.
VU: Es curioso cómo puede resultar duro y liberador a la vez.
K: Es algo muy oriental, yo creo que cae del lado más budista del Tenrikyō. Es como que no hay un auténtico rencor hacia EEUU; casi dan gracias por haber podido llegar a este nivel espiritual. Para nada creo que la religión sea la salvación de nada, y como esperanza no la veo, más bien como una debilidad. Pero tiene algo mágico de oriente algo que creo que solo puedes recoger si vives en países con religiones budistas, y más que con su religión con su filosofía, que es lo que recogen todas estas religiones “nuevas”. Es algo que me llama la atención muchísimo.
VU: Hablemos de tu música ¿cómo fue el proceso de creación de Drop Out?
K: Drop Out fue un viaje para y dentro de mí, fue conocerme hasta el límite de llegar a asumir los esquemas más horribles de mi vida pero también los más bonitos. Drop Out habla de mí, es ese trabajo que escupe vida. Es mi trabajo más contradictorio, creo que más que Days Before, o Sniff Sniff que definen más mi persona y mis pensamientos; odiaba el mundo, sin embargo, en cuanto hacia sol lo amaba y el simple hecho de que todo se iluminara para mí, me otorgaba una vitalidad que no soy capaz de describir sin Drop Out. Es el ying y el yang, mis vicios y mis virtudes.
VU: ¿Qué has conseguido tú con ello (con Drop Out) y qué te han aportado los demás?
K: De repente me di cuenta de que mucha gente se sintió identificada y eso es lo mejor, es un trabajo para mí, como todo lo que hago, pero, me di cuenta que Drop Out emergió en un momento que no mucha gente utilizaba la electrónica como instrumentación para su rap, y yo llevaba loco con eso desde que empecé. Percibí que la gente bailaba más en los conciertos, que cambiaba la idiosincrasia de un concierto se supone de rap. Eso es lo que más me aportó a mí y creo que a la gente también, aunque te diré que estuve mucho tiempo hablando con gente para meter mis directos en movidas de electrónica y hasta hace poco los organizadores no querían; ahora esta a la orden del día. Digamos que Drop Out (aunque antes ya tenia trabajos hechos) es el principio de mi viaje, musical-personal hacia lo que soy hoy.
VU: Explícanos la portada ¿Quién es ella y por qué lleva escrito/dibujado lo que lleva?
K: Ella es mi pareja, y lo que lleva escrito son los mensajes implícitos que quería trasmitir con Drop Out de forma explicita; es decir, a pesar de que tú no escucharas eso de mis letras, te lo he puesto en la cover para que lo entiendas: la mujer como la vida, la paz espiritual como objetivo, la denuncia de las palabras de Basquiat por cómo se está banalizando el arte y su expresividad, y la vigilancia piramidal del poder como consecuencia social de cómo y dónde vivimos.
VU: Que Drop Out es una mixtape retrospectiva lo vemos muy claramente en Inland Empire por ejemplo ¿era el momento, es tu personalidad o es cosa de tú generación?
K: “El mundo es un paño con fuego”, somos una generación autodestructiva, la primera generación que va a vivir peor que sus padres, somos una generación suicida, no sintonizamos, estamos anclados en una idea efímera. Tiene que ver con nuestra falta de viabilidad, Inland Empire habla de cómo intentamos ser los reyes de un sometimiento que nos han impuesto, date cuenta de que no somos capaces de empatizar y unirnos porque cada uno busca su felicidad personal por encima de los demás, falta cooperativismo, la vida postmoderna es el cáncer, buscamos ser distintos, sin embargo, solo somos robots, el cóctel molotov que no explota porque somos sumisos, para el estado solo somos basura.
VU: ¿Qué papel juega el surrealismo en ti? Porque vemos por ejemplo, en Triángulos: “Mensaje Basquiat en escenarios de Dalí”.
K: Es totalmente un puto revival de esos conceptos que el hombre perdió en sus sueños, cree en la realidad tangible, olvida lo que es material, conviértelo en pensamiento.
Dalí para mí es uno de los diseñadores del sueño, Dalí consiguió que la gente asumiera una faceta que despreciaban de su interior.
El surrealismo es Drop Out, si no hubiesen conocido e interiorizado el trabajo de Dalí o Basquiat no existiría Kaixo como es hoy.
VU: ¿De los 7 artes, cuál es tu favorito?
K: El cine y la música. Aunque creo que todas me aportan algo.
VU: Una escultura, una arquitectura, un cuadro, un libro, un disco, un filme y un modelo de Jordan’s.
K: La piedad de Kollwitz; el Guggenheim; El Jardín de las Delicias; Mujeres de Bukowski; Stalker (1979) de Andrei Tarkovsky y Vans, fuck Jordan’s.
VU: Mencionas a Timothy Leary y sus “viajes”, Jack Kerouac, Allen Ginsberg, John Lennon, William Burroughs, Charles Mingus y Aldous Huxley fueron sus pacientes en el estudio del LSD. ¿Has consumido LSD (para la mixtape) o es un viaje metafórico?
K: He consumido LSD muchas veces pero para Drop Out especialmente; el tripi y el DMT son una fuente de la sabiduría si no lo mezclas con alcohol y mierdas parecidas; si la mezclas prepárate para lo que sea haha tu cerebro se puede convertir en el jodido Apocalipsis Now y tú en el coronel Kilgore.
VU: ¿Qué opinión te merece ‘Miedo y asco en Las Vegas’?
K: Miedo y asco es un clásico, un clásico dramático que habla del nihilismo y de la sociedad de su época, aniquilados los ideales de los 60’s, gente que se quedo en la percha y su propio drama personal ahogado en ácido en una sociedad que ni los acepta ni los entiende, a no ser que caguen billetes.
VU: ¿Qué te has metido antes/durante la entrevista?
K: Hace unos días molly, y hace más, otras cosas; cualquier cosa que no sea crack y heroína, con un poco de cabeza y en compañía, me vale (quitando esas putas basuras de drogas raras tipo crocodaile), durante té verde. Por la semana hay que aparentar que estas infectado, si no los ladrones de cuerpo irán a por ti.
VU: En Inland Empire dices “El mundo es un paño de fuego”, yo lo interpreto como un juego de palabras del mundo es un pañuelo, nos conocemos todos, somos 4 gatos y esto está ardiendo, estamos muriendo / somos el pañuelo ardiendo en un coctel molotov que explotará en contra de un todo. ¿Cuál era la intención con la que la escribiste?
K: Mi explicación es mucho más sencilla, esto está ardiendo y solo hace falta alguien que se atreva a tirarlo para que explote de una puta vez y se rompan todos los miedos que están manejando un mundo a punto de explotar; no necesitamos cambiar el mundo sino empezar de cero con uno nuevo. De todos modos me gusta la libre interpretación, está bien lo que tú dices ¡quédate con la tuya si quieres!
VU: ¿Te consideras un artista? ¿Podríamos considerar a algún rapper español un artista? ¿Qué caracteriza a un artista en tu opinión?
K: Hace tiempo podría haber definido con total certeza lo que es un artista, hoy no sé ni lo que es el rap, ni la música ni el arte, sé que todo lo que me rodea puede ser transformable en sonido, en cine, en un oleo, en una fotografía, en pena o en gloria. El problema, yo creo, son los filtros del Instagram que se le ponen a la vida. (no en la música que quedan genial, desde el reverb de Hendrix al autotune de Future).
VU: ¿Crees que las personas que han oído tu trabajo han logrado entenderlo? ¿En qué %? ¿Es ese uno de tus objetivos o prefieres la libre interpretación de cada uno?
K: Yo creo que habrá gente que lo habrá entendido a un 50%, un porcentaje de gente que ni me pregunta por redes sociales o no me conoce; el que me conoce lo entiende sin preguntar a un 60% solo hace falta pasar conmigo una semana. Y luego está quien lo pregunta y me lo destripa entre pintas y nocturnidad. Por último está la libre interpretación que es lo que más me gusta, me encanta escuchar las ideas y paranoias que se hizo la gente con Drop Out, son preciosas.
VU: ¿Qué peso tiene Lynch en tus influencias? ¿Le escuchas o solo consumes sus trabajos audiovisuales? ¿Tu filme suyo favorito?
K: Textos, algún libro, guiones sus películas, su forma de ver el arte, sus películas y sobre todo su cara de “me la sudáis” me recuerdan a una versión “comercial” y macabra de Aki Kaurismaki. Mi film suyo favorito diría que Carretera perdida, pero Inland Empire me flipa, no sé, me gustan todos por igual, todas tienen algo especial, un pedacito de su yo de ese momento, eso es lo que me gusta del cine, ese pedazo de tu yo que se queda en cada película que haces, a no ser que te llames James Cameron y seas un mierda, porque solo hizo dos películas buenas en su vida.
VU: En Bullying: “Mi generación quiere droga olvidarlo todo vivir como Escobar y morir como Jim Morrison” Creo que lo defines bastante bien, lo de vivir como Escobar está claro, y más en el mundo del rap, pero morir como Jim Morrison?
K: Jim Morrison es un ícono de la anti fama, como toda la generación del 27, son genios que se daban cuenta que estaban sometidos a una realidad que era la fama, que incluso era más ridícula que la propia vida rutinaria; gente expresiva que vivía por encima de las normas impuestas, pasaron al siguiente nivel saltándose todo y cuando se vieron en el faranduleo del famoseo, se vieron en otra jaula; y de jaula en jaula consumiendo la droga más adecuada al tamaño de la misma. Hasta que llegaron los 27 para llevárselos hacia la única jaula más grande que la vida de momento conocida.
VU: Dices venir de “Venus” y en tu twitter pone que eres, además, de Florianopolis y Tokyo, explícanoslo.
K: Me encantaría vivir en Floripa todo el año, pero a veces me siento tan solo conmigo mismo que estoy tan triste como un consumidor de pastillas para la depresión de Tokyo y otras veces solo deseo la paz que me da pensar que hay otra materia y otros lugares distintos al planeta en el que vivo, aunque sean tan inhabitables como Venus.
VU: ‘Borracho como Charles’ (Bukowski) y ‘quitarme la vida como Steffan Zweig’ ¿en cuanto a literatura, qué lees, qué te gusta leer y que te gustaría leer?
K: Fui y sigo siendo un amante de la generación Beat, pero la tengo un poco apartada ahora mismo; Bukowski es mi piedra angular en la literatura, mi tía me regaló con 15 o 16 años un libro de él “pulp” y desde ahí hasta acabar con todo lo que escribió no he parado. Ahora mismo no estoy leyendo casi nada: discursos de Krisnamurti, volviendo a revisar “Sobre la Fotografía” de Susan Sontag y el “Viaje Del Escritor” para el trabajo que desempeño, pero poco más. Me gustaría leer todo sobre Krisnamurti y de Steffan Zweig y quedarme con todo el conocimiento, pero lleva su tiempo, no son 140 caracteres.
VU: ‘ACAB’ ¿Tienes una opinión formada tras esas siglas sobre la policía?
K: Pena más que odio siento, de cómo un ser humano se puede degradar tanto a someterse a un poder que lo trata como un perro y lo obliga a desahuciar a gente mayor de 70 años o a padres con hijos con dependencia y en vez de eso no se revelan a su mando. Es pena más que asco y rabia más que odio.
VU: “Egoismo el dinero pero joder todo lo que quiero primo”, el dinero es una contradicción constante en tu trabajo.
K: Money is the devil. Me obliga a que lo tenga, me obliga a que lo consiga, lo necesito para comprar comida, ropa y cualquier cosa que necesite a nivel material, me obliga a que lo gaste y lo peor es que es solo un trozo de papel con dibujitos y es lo que maneja las conciencias de los hombres y mujeres del 80% (quería decir un 40% pero no estamos para Utopías) de la tierra. Me da asco, pero lo necesito; no como a la policía o al Partido Popular.
K: Saqué en Diciembre “Days Before Sniffin” que es el inicio de otro viaje, el New Punk; curiosamente después de utilizar el término, y sin conocernos vi que había peña conectada al asunto, a entender el rap o el trap o el nuevo rap como el nuevo Punk de la gente joven. Creo que en España ya nos parecemos más a la generación X de “Clercks” (generación perdida) que a la generación Y de la que hablan los sociólogos, la única diferencia es internet.
Por otro lado en Abril saldrá mi primer álbum “Sniff Sniff” consagración personal del New Punk, la creación por encima de cualquier cosa, aunque suene pretencioso, las tendencias son para agarrarlas y transformarlas al gusto, sacar tu propia conclusión para tu creación personal.
Y para más adelante hay un proyecto muy macarrada con OtterGang y otro en aire con Nbeatz, eso en lo que resta de año.
Aparte de intentar hacer la mayor cantidad de vídeos posibles de “Sniff Sniff” para llegar visualmente a la gente con mi bruh bruh IAMTOMMY; masterpiece en Galicia en materia audiovisual y yo creo que si no lo es, lo será en España.
Gracias por todo. Un año después, la entrevista ha finalizado.